Organizar tu semana parece fácil… hasta que llega el miércoles y sientes que el caos ya te ganó. La buena noticia: no se trata de que seas “desorganizado”, sino de pequeños errores que todos cometemos y que tienen solución.
Error 1: Hacer listas interminables
Apuntar todo lo que se te ocurre genera más ansiedad que claridad. Al final, tu lista es tan larga que no sabes por dónde empezar.
👉 Solución: aplica la regla 1-3-5: un objetivo grande, tres medianos y cinco pequeños por día.
Error 2: No reservar tiempo para imprevistos
Planear como si todo fuera perfecto es una receta para la frustración.
👉 Solución: deja siempre un bloque de “tiempo colchón” (mínimo 20% de tu día).
Error 3: Confundir ocupación con productividad
Llenar tu agenda no significa que avanzas.
👉 Solución: revisa cada tarea preguntándote: ¿esto me acerca a lo que realmente quiero lograr?
✅ Si evitas estos errores, tu semana cambia por completo. Y si quieres profundizar en cómo diseñar una agenda con sentido, puedes unirte al Taller Tiempo con Propósito.